Mi experiencia con la flauta

Mi nombre es Nerea Goldaracena, alumna en la escuela de música de Olite. Mi madre me contaba que cuando era pequeña siempre le decía que yo quería tocar la flauta y ya que era súper cansina pues mis padres decidieron comprarme una flauta travesera de hueso. También, mi madre me contó que el vendedor de la tienda donde compararon la flauta le dijo que esa flauta, era muy difícil de hacerla sonar, pero yo, después de muchos intentos, lo logré. Era tan grande mi ilusión por empezar a tocar la flauta real, que el primer día de clase me empeñe en tocar la flauta entera, cuando por lo general, el primer día, solo se toca la embocadura.  

Para mí, tocar la flauta es olvidarme de las preocupaciones, dejar los estudios por un rato, relajarme y meterme en un mundo distinto, un mundo donde no importa si te salen mal las cosas, porque siempre puedes volver a hacerlo de nuevo, un mundo en el que de nada te sirve frustrarte, simplemente levanta la cabeza, respira y vuélvelo a intentar, un mundo donde sin esfuerzos, no hay éxitos, éxitos que una vez conseguidos mi sensación es de felicidad suprema, de tranquilidad, un mundo en el que no hay ni mejor ni peor, simplemente eres tú y tú puedes conseguir todo lo que te propongas.

Ya que este año me veía con mas fuerzas que nunca y ya que voy a intentar controlar, o quitar mi miedo escénico, porque creo que ya va siendo hora, pues he decidido presentarme al conservatorio. Si entro, una de mis ilusiones es ser profesora de flauta y espero que, con esfuerzo, logre conseguirlo.

Yo animo tanto a chicas como a chicos a apuntarse a flauta porque enserio, yo sin música no sería yo y tampoco quiero imaginar cómo sería mi vida sin ella.

Nerea Goldaracena - 14 años

Escuela de Música de Olite